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Amigo futbolista II

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Lee la primera parte aquí. Esa noche me costó conciliar el sueño, mi mano palpitaba caliente pensando que había tenido el pico del Eric hace un par de minutos. Todo parecía un sueño, uno bien caliente. Me pasaba la mano por la cara, tratando de alcanzar ese aroma a pico, todavía me rondaba, todavía me calentaba. Al otro día nos despertamos súper tarde, cada uno en su cama (obvio. Con algo de caña. Hablamos de los preparativos del partido, pero nada de la paja mutua que compartimos anoche. Tenía dos opciones, 1. se hacía el hueón o sinceramente no recordaba nada por lo borracho, cualquiera de las dos opciones me ponía nervioso, ¿tenía que comentarlo? mejor no, me lo iba a guardar. Nos juntamos con los otros cabros pa’ almorzar. No existía un buen ambiente entre nosotros, nadie hablaba mucho, todo seguía con caña, quizás qué otras cosas se lamentaban en la mesa. Esa tarde, perdimos por goleada el primer partido ¿y cómo no? Ninguno estaba en condiciones de jugar bien, nos fuimos a los cam...

Sangre II

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Lee la primera parte aquí No comprendía las palabras que salían de la boca de mi mamá ¿mi hermano? ¿León? ¿qué le pasa? ¿Cómo dice algo así? pero entre más confusión entraba en mi mente, más despejado se veía… todo y comenzaba a tener sentido, el hecho de que mi mamá nunca hablará de mi papá, el hecho del porque nos trataban de una forma tan especial en esa casa, mi cabeza comenzó a girar y lo único que atine fue a salir corriendo de la habitación, confundido, nervioso, sudando, ella intentó detenerme pero no escuché, debí haber escuchado… Llegué a la sala de esperas y ahí estaba León, se acercó para conversar, me tomó por los hombros al verme nervioso, pero solo atiné a empujarlo y corrí hasta la salida. No podía verlo. Me siguió hasta la calle y esta vez no me soltaba de las manos, pasaron varios minutos antes de que pudiera salirme la voz. -¿Qué pasó? - me preguntaba repetitivamente y alterado  -¿Tú sabías? - le pregunté muy bajito -¿Qué cosa? - estaba bien nervioso León, -No me...

El Hermano chico de la Isa I

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  Esto pasó hace unos 10 años más o menos y aún lo recuerdo con lujo de detalle. Llevaba casi un año pololeando con Isabel o la Isa como le decían sus amigos. No era mi primera polola, pero yo sí era su primera pareja. Nos conocimos en el colegio y seguimos hasta la universidad, antes de qué todo cambiará súper rápido. La Isa no tenía padre, pero sí un hermano y una mamá religiosa y algo bipolar. Quizás era por eso mismo que le costaba tanto “soltarse”. Era algo rubia, de tez clara, facciones que cualquier hombre podría considerar perfectas, era tranquila, de esas personas con personalidad extrovertida, pero que de vez en cuando sacaba su voz, media enojona a veces, pero tierna al final, para nada celosa, no carreteaba mucho, la polola perfecta, el único problema es que no era muy afectuosa. No la forzaba ni nada, pero la primera vez que lo hicimos se puso a llorar y cada vez después de eso, cada vez que intentaba ponerme “cariñoso”, me hacía el quite, no la presionaba ni nada, per...

Ultrasolo (Profe vs Profe)

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Nervioso, ansioso, inseguro, todo eso sentía antes de mi primer día. Había estudiado harto, cursado una práctica intensa, me sentía capacitado a full, pero aún así escuchaba esa voz de mierda en mi cabeza diciendo: “Te van a odiar, lo harás pésimo”.  No me costó mucho encontrar ese trabajo, era un colegio chico, particular subvencionado en La Florida, todo muy normal, llegaba como el nuevo profesor de biología. Mis temores iban por todos lados. Siempre me sentí inseguro por mi estampa, soy medio bajito, flaco, entonces siempre pensé que no me tomarían en serio, además temía que si se me salía lo gay, podría perder mi pega, lo cual la verdad nunca pasó por suerte. Ese primer día fui recibido muy bien por las otras colegas, la mayoría eran profesoras jóvenes, muy amables, congeniamos de inmediato. Los alumnos también eran muy simpáticos, algo distraídos, ruidosos, lo normal para un curso de 1º medio, así que todo iba viento en popa. Full enfocado en el trabajo, quizás demasiado. Me c...